Caudalímetro magnético Supmea utilizado en la fábrica de galvanoplastia. Para obtener el acabado superficial deseado, el control del baño galvánico debe ser preciso. Conocer el flujo volumétrico del electrolito circulado ayuda a optimizar el proceso de galvanoplastia. Además de la temperatura y el caudal, es un parámetro de proceso esencial para la calidad del proceso de electrogalvanizado. Sin embargo, el medio también es difícil de medir. El ácido tiende a cristalizar tan pronto como deja de moverse. Y la aplicación se realiza en un entorno corrosivo y en presencia de un fuerte campo magnético, que puede provocar averías y daños en muchos caudalímetros.
El caudalímetro electromagnético de Supmea utiliza un revestimiento de PTFE resistente a la corrosión y electrodos Ta, que se pueden utilizar para líquidos extremadamente corrosivos y es muy adecuado para la medición de caudal en galvanoplastia u otras aplicaciones de procesos químicos en las industrias del metal y el acero.